Mayo 26 de 2010
En esta parte del libro, el autor, aborda varios temas que al final parecen agruparse bajo este título. Estos temas son: la genialidad de Kaiser, el dramaturgo, que pierde su autenticidad cuando entra a la política; la decisión de casarse con Lola que se la presenta como algo inexorable; la descripción de su propia neurosis que lo motivaba a «cometer» actos desbordados, y, por último el descubrimiento que hace gracias a Lola, que tiene que ver con que no sólo ella, sino todos los seres humanos guardan un secreto, pero al contrario de los artistas, dice, no logran articularlo. Este reconocimiento lo sitúa distinto frente a los demás, ya que a partir de este momento tendrá la voluntad de conocer a los otros, a quienes antes apenas «veía» en tanto lo divirtieran. A partir de entonces, el paisaje del narrador será mucho más rico y estimulante.
Todos estos temas animan a una reflexión: la dicotomía entre lo auténtico y lo que no lo es. El narrador parece alinear el secreto de cada uno en lo auténtico. Y si bien no lo define, afirma, poniéndose como ejemplo, que este secreto o reducto de autenticidad de un ser humano – lo que lo distingue de todos los demás– es suceptible de transformarse por dos vías: por sí mismo y en contacto con los otros. El ejemplo para lo primero está en el punto en el que el narrador habla de su neurosis y de la forma que empleó para apaciguarla «con la fuerza de la conciencia, de la voluntad y de la humildad». Más adelante añade: «El alma enferma conoce bien el secreto de su mal y suele buscar su antídoto con conocimiento de causa» (p. 340) Cabe entonces preguntarse si para él «ese antídoto» es la escritura como una forma de arte –para él la vía de articular su secreto– y el medio en el que esas tres fuerzas se desplegaron, logrando así devenir en otro auténticamente distinto al anterior.
El ejemplo para lo segundo– la transformación en contacto con los otros– se evidencia en la relación con su mujer, Lola «la enfermera invisible» que en la medida en que va ocupando una posición central en su vida, lo va conduciendo hacia una nueva manera de ver a los demás. En la convivencia con ella, el narrador descubre la voluntad de conocerla, de entrar en su singularidad y equipara esto al amor.
Ahora falta examinar la otra cara de la moneda: lo no auténtico ¿Se puede delimitar? El narrador sólo aborda este asunto refiriéndose al Kaiser y a sí mismo. El Kaiser pierde su autenticidad cuando entra a la política, él, en cambio, la gana cuando «deja de dar lo que los otros esperaban de él y comienza a dar lo que puede».
En conclusión la autenticidad, el secreto, la singularidad –todas palabras casi hermanas– se expresa para Marai de adentro hacia fuera, es un acto de la voluntad y es en relación con sigo mismo que un ser humano puede ser o no auténtico. Ahí está su secreto, el secreto de lo humano.
Otros temas:
– La soledad es el elemento vital del escritor
– La tragedia del genio
– El secreto de lo humano
– La percepción de lo auténtico
– Vivir con sus neurosis